Segunda entrega sobre la feminización de la pobreza.
Por tradición,
por cultura, porque siempre se ha hecho así, porque no queda otro remedio,
porque alguien tiene que cuidar de la familia, porque no le va a servir de
nada, porque no tiene capacidad,... Miles son las excusas que han recluido a la
mujer a la ignorancia sólo por el hecho de serlo, impidiéndole formarse, y
acceder así a una vida mejor. Esto
provoca un empobrecimiento de la sociedad.
En homenaje a las mujeres, aquí va un poema de una gran mujer: Gloria Fuertes.
Soy sólo una mujer
Soy sólo una mujer y
ya es bastante,
con
tener una chiva, una tartana,
un
“bendito sea Dios” por la mañana
y
un mico en el pescante.
Yo quisiera haber sido delineante,
o
delirante Safo
sensitiva
y heme,
aquí,
que soy una perdida
entre tanto mangante.
Lo digo para todo el que me lea,
quise
ser capitán, sin arma alguna,
depositar
mis versos en la luna
y un astronauta me pisó la idea.
–me
detuvieron por la carretera—,
soy
sólo una mujer, de cuerda entera
soy sólo una mujer y ya es bastante.
(Cómo atar los bigotes del tigre, 1969)
Bonito poema!
ResponderEliminarSe me vienen muchas cosas a la cabeza para comentarte sobre esta entrada, pero no habría espacio suficiente... :P
ResponderEliminar